sábado, 22 de octubre de 2011

25ª etapa: Portomarín-Palas del Rei

"AFINIDAD DE ALMAS"



Después de las experiencias de chinchadura...viene la calma...la aceptación...Solo en la aceptación encuentro la PAZ interior..solo sabiendo que la única verdad es lo que pasa, sin interpretaciones posibles, hago todo lo posible por limpiar mi filtro para que pueda ver lo que acontece desde la máxima pureza...
Ha venido Bea a mi camino de santiago...igual que a mi vida vino hace 12 años...

El albergue tiene que es especial porque ella, para 2 días, no va a tener credencial, así que no podemos ir a los públicos...En él me encuentro con Sergio, un italiano con una sonrisa enorme, y llevando el tigre sobre su mochila, ayer me hizo sonreir en el camino...Su mirada es de paz, y noto que quiere compañía, para cenar sobre todo...sin embargo hoy no estoy muy complaciente porque viene mi amiga, y me apetece hablar con ella tantas y tantas cosas que hace 2 meses no nos hemos dicho...Así que no le invito...
Desde fuera puede parecer un gesto maleducado...desde donde lo hago, me respeto ante todo y soy auténtica con mi deseo de compartir con ella en exclusividad...la vida es así...aceptación...

Así que durante la cena charlamos de nuestras cosas...y durante el camino del día siguiente también!...
Qué diferente es hacer el camino sola a acompañada...sobre todo, con alguien con quien nada es un esfuerzo, porque no nos hace falta hablar...

Los intercambios de sucesos transcurren, y, con un camino junto a la carretera, se agradece, pues el exterior no es tan atractivo...
Salimos de noche, casi amaneciendo...sin prisa, pues en nuestra habitación donde solo éramos 4 personas, se lo toman con calma...No se despiertan, e intento ser lo más silenciosa posible...La noche fue estupenda, y he dormido encantada de la vida...
 

El trayecto se me ha hecho corto, aunque la sensación finalizando era de haber recorrido toda una vida...claro está, hablando...Las cosas que pueden ocurrir en tan solo 3 meses!!!
Cuando una está conectada y se da cuenta de que todo puede ser una oportunidad de aprender sobre una misma, la riqueza interior (podéis comprobarlo en estos escritos), es desmesurada, pues al desarrollar la sensibilidad y estar a flor de piel, todo llega de fuera a dentro...

En la última parada que hemos hecho, a 5 km de nuestro destino (hoy solo 25 km), y el placer de disfrutar frente al cálido solecito una cervecita con limón...hemos acabado con nuestro ritual de siempre cuando estamos en casa: una tirada del tarot de Osho...siempre conectado, dando información para prepararnos para cada momento de nuestra evolución....Yo no lo traje al camino porque quería venir sin nada, con lo esencialmente necesario, vivirlo sin instrumentos ni herramientas...pero, ciertamente, me lo suelo llevar a todos los lugares...después de haberme acompañado en mi vida y evolución durante más de 13 años...Lo adoro...
El camino, entre confesión y confesión, nos ha servido para ir asentando las bases de un proyecto que tenemos ante mano, emocionante, precioso, creativo, donde ponemos nuestro potencial y recursos, nuestras habilidades y capacidades al servicio de la vida, para dar a conocer el lenguaje del alma...Ya lo conoceréis cuando salga a la luz...os va a gustar...


Y, además, recogiendo las plantas medicinales que nos ibamos encontrando por el camino...Yo, recogiendo la información que ella ya lleva incorporada, su sabiduría ancestral...Ella recogiendo mis observaciones, también resultado de haber entrenado mi inteligencia esencial...Una riqueza compartida y mutua...
Esto es lo que pasa cuando 2 almas afines, cuyo objetivo en la vida es conectar con una misma, ser una misma, estar en conexión profunda con la vida y las señales que va poniendo en nuestro camino, liberando todo aquello que ya no vale y no es nuestro...para poder autorrealizar la misión a la que hemos venido...para poder sentir la plenitud de cada momento con el alma llenita...


Cuando hemos llegado a Palas del Rei, mis pies podrían haber seguido andando otra etapa, pero no....me quedo con ella, y mañana seguimos juntas, así la última a Santiago la hago solita, de 40 km, y, según la predicción del tiempo, lloviendo!...Vaya final, eh?...¡Espectacular!...
Muchas gracias por vuestro interés y fidelidad para llegar hasta aquí...el recorrido del camino se va apagando...y me voy despidiendo poco a poco de él...ahora, cuando más en forma están mis pies y mis piernas...

Un abrazo hermanos afines!

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